La dieta DASH esta orientada para regular la hipertensión a través de la dieta. Con este plan dietético, se quiere conseguir la disminución del sodio en la dieta por debajo de niveles de 2,3 gramos, hasta 1,5 en la más baja en sodio. También se quiere a su vez, aumentar el consumo de calcio, magnesio y potasio, que tienen relación respecto a la mejora de la hipertensión.
Este tipo de plan dietético, es planteado con una disminución de productos procesados y precocinados, y a su vez aumentar el consumo de verduras, cereales integrales, frutas, pescados, frutos secos y carnes blancas, junto con el aumento de consumo de lácteos principalmente desnatados.
Este tipo de plan, también puede ayudar a bajar el colesterol, relacionado con enfermedades cardiacas (LDL), y dado que es un patrón bastante saludable, se podría utilizar en personas que puedan padecer diabetes, otro tipo de dislipemia, o que no tengan ningún tipo de patología.
El colesterol elevado y la HTA, son dos grandes factores de riesgos para la enfermedad cardiaca y accidentes cerebrovasculares (ACV).
Restringiremos también los alimentos con alto contenido en sal, grasas saturadas y azucares añadidos. Para reducir el consumo de sal, se recomienda:
- Leer bien las etiquetas de los alimentos, y escoger opciones con bajo contenido en sodio y sin sales añadidas.
- No añadir sal al cocinar, y optar por otro tipo de especias.
- Escoger carnes blancas sin piel, pescados y cortes de carne sin grasa.
- Añadir en la dieta mas verduras y frutas frescas.
- Procurar no comer demasiado fuera de casa, y si es necesario, pedir platos sin sal.
Dentro de las recomendaciones generales según la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición, nos encontramos:
- Controlar la sal para cocinar, utilizando menos de 3 gramos al día.
- Evitar añadir a las comidas las típicas pastillas de concentrado de carne o pescado.
- Evitar productos precocinados y ultra procesados.
- Emplear en sustitución de la sal, especias para dar mas sabor al alimento, junto con hierbas aromáticas (pimienta, pimentón, limón, ajo, cebolla, perejil, laurel, tomillo…).
- Evitar bebidas con gas y estimulantes.
- Utilizar técnicas culinarias como la plancha, asado, horno, vapor, microondas, y evitar las frituras, rebozados y empanados.
- Tomar una correcta cantidad de agua al día, mínimo 8 vasos.
- Consumir pescado frecuentemente y carnes blancas. Limitar las carnes rojas a 1 o 2 veces por semana.
- Tomar mínimo 3 piezas de fruta al día, preferiblemente enteras y no en zumo.
- Tomar 2 o 3 lácteos desnatados al día.